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martes, 1 de agosto de 2017

Ambientes empresariales con vacíos de integridad

El factor determinante en la calidad de las relaciones de una organización es la integridad. ¿Pero tenemos claro que es? la síntesis de su definición es bastante exigente: Íntegro significa: No alcanzado o tocado por algún mal. Integridad va más allá de la entereza moral.

A continuación un pequeño test de integridad:

1. Al parecer has demostrado a tu jefe cualidades que le permiten confiar en tí. Con base en ello quiere saber tu opinión sobre una competencia de una persona, como por ejemplo el dominio de ésta para cortar bocados de sushi en la cocina. El Jefe te solicitó le indicaras tu opinión al respecto. 

¿Cuál de las siguientes respuestas representa mejor tu integridad?

a. Los corta con rapidez, pero en trozos desiguales. 
b. Los corta en trozos desiguales y según dicen los demás tiene las uñas sucias, lo que me da asco. 
c. No evidencio que sea capaz de cortarlos bien. Es más considero que no le gusta lo que hace y se nota en su desdén.

Como podemos observar no es fácil responder. Pues en la a. Se observa objetividad y equilibrio sin mucho detalle, mostrando aspectos que describen puntualmente la competencia.  En la b. La apreciación puede evidenciar una preocupación de la persona más allá del análisis de la competencia específica. En la c. un juicio completo frente a la actitud de la otra persona. 

¿Cuál será entonces la respuesta que refleje la mayor integridad por parte de quien está emitiendo el concepto para su Jefe?

Todos los días, en diversos momentos, los círculos de confianza, círculos de poder, o personas más allegadas a quienes toman las decisiones finales, buscan sobresalir ante éstas para mantener su estatus. Podemos decir entonces, que desde el momento mismo en el que un Jefe se aproxima para obtener información sobre otra persona, está rompiendo el círculo de integridad y abriendo una peligrosa puerta hacia la manipulación de la información y la opinión. 

Este método por siglos, ha permitido a los Jefes y Directivos obtener diferentes puntos de vista, siempre sesgados por el deseo de poder o por los intereses particulares, creando fuertes vicios y una elevada exposición de aquellas personas que por sí mismas no pueden aclarar la situación de sus competencias o que por descuido, falta de entrenamiento o seguimiento, se han acostumbrado a hacer las cosas de determinada manera o incluso porque están nuevas y apenas están leyendo los protocolos particulares de una organización. 

Cuando no están claros los alcances de las competencias y las empresas no cuentan con una experiencia amplia en el manejo y regulación del poder, se evidencian puntos de vista que pueden confundir y exponer fuertemente a personas que incluso generan valiosos aportes a las empresas. Creándose un ambiente de desconfianza, estrategia y táctica en las relaciones que distorsiona los inductores que producen empatía y sinergia.